
Plantamos plantines de Acacia Auri en la cuenca hidrográfica de Kamalig, Poog, Ciudad de Toledo (Filipinas). Esta iniciativa pretende recuperar la fuente de agua que abastece a más de 100 hogares de la zona. Los residentes más antiguos describen el flujo de agua del depósito como del tamaño de una cabeza humana. Con el desarrollo de la zona, sobre todo de la minería y la explotación de canteras, el agua empezó a escasear y ni siquiera es un hilillo durante los meses de verano. Otra causa que contribuye a la escasez de agua es el posible movimiento de la capa terrestre debido a los terremotos, además del aumento de la temperatura/cambio climático sin precedentes debido a la forma irresponsable de tratar la naturaleza/el medio ambiente. En los últimos cinco años, el agua ha sido tan escasa que la gente se pelea por el suministro de agua. Algunos empezaron a cavar su propio pozo, pero muchos de estos pozos no pueden suministrar el agua necesaria para el hogar.
Creo que la gente o bien carece de conocimientos/no está bien informada de las consecuencias de ir más allá de sus derechos sin las correspondientes responsabilidades, pensando sólo en el presente y en sus propias necesidades/intereses. O bien conociendo la belleza y la utilidad de mantener la biodiversidad y la armonía en la creación, son descuidados y no hacen nada. Este hecho es realmente una tragedia, ya que estamos enfrentando una EMERGENCIA CLIMÁTICA desde hace mucho tiempo.
Las frecuentes tormentas eléctricas, como las fuertes lluvias a principios de septiembre de 2021, hicieron que los cursos de agua se desbordaran y dañaran las plantaciones y los edificios/casas a lo largo de las riberas del río y las zonas bajas.
Una acción concreta que hemos llevado a cabo recientemente es la plantación de hortalizas de rápido crecimiento, como el saluyot y las espinacas. Sólo hay que echar la semilla en la tierra fértil antes de la temporada de lluvias. En menos de dos meses, podemos tener verduras para una alimentación sana. Estamos permitiendo que los vecinos sin tierra labren y planten hortalizas y tubérculos en algunas zonas vacías de nuestro terreno.
En los próximos tres años (2021 – 2024), planeamos practicar y compartir diferentes insumos orgánicos para conservar la tierra y mejorar el rendimiento de los cultivos. Recoger buenas semillas de hortalizas, árboles frutales y árboles forestales y emplear la ayuda de las mujeres para sembrar semillas de árboles autóctonos y diferentes variedades de bambú que se venderán o distribuirán para su plantación. Animar a las iglesias/escuelas/empresas a que exijan a sus miembros/estudiantes/empleados que cultiven árboles en sus tierras o en terrenos públicos. Seguir colaborando y dando información, educación y comunicación sobre el clima y la ecoespiritualidad a los grupos, especialmente a los jóvenes y a las instituciones/grupos afines, y desafiarlos/moverlos a que se comprometan con acciones factibles como el cultivo de árboles, la jardinería, etc., para lograr una tierra habitable.
Be the first to comment